La Policía de Ras Al Khaimah ha intensificado su política de tolerancia cero contra los conductores que incumplen la normativa que prohíbe llevar cristales con un nivel de tintado superior al 30%.
Actualmente y en base al artículo 32 de la nueva ley federal de tráfico, los conductores se enfrentan a multas de 500 dirhams y 30 días de embargo del vehículo por llevar demasiado oscurecidas las lunas de su vehículo.
El brigada Mohammed Saeed Al Humaidi, director general del Departamento central de Operaciones de la Policía de RAK, insiste en que incumplir esta normativa es arriesgado para todos los usuarios de la carretera, ya que "afecta seriamente y obstruye la visibilidad del conductor, especialmente por la noche".
Por ello, la policía está desarrollando "campañas de inspección diarias e incesantes en todas las carreteras del emirato para evitar que los conductores por descuido y despiste participan en este tipo de prácticas ilegales", explica Al Humaidi, según publica Khaleej Times.
Hasta el momento se han distribuido 25.000 folletos entre los conductores para informarles sobre los peligros del exceso de tintado y explicarles que muchos accidentes graves se han atribuido en parte a este motivo.
Para detectar incumplimientos de la normativa, explica, Hamaidi, la policía cuenta con "dispositivos avanzados".
