El caso del ingeniero español Borja Brañanova, que reside en Dubai desde hace 14 años y que mantiene desde hace meses una intensa lucha para llevar a sus hijos de vacaciones a España, ha tenido en los últimos días una amplia repercusión mediática y política en territorio español.
Brañanova, cuyo proceso de divorcio se encuentra desde hace tres años en los tribunales emiratíes, tiene dos hijos de nacionalidad española a los que no ha podido llevar de vacaciones a España, a pesar de que la madre de los niños, de nacionalidad sudafricana, sí que ha podido hacerlo, lo que para el padre supone una clara discriminación.
Después de que EL CORREO DEL GOLFO adelantara la situación de este ingeniero el pasado 12 de junio, son muchos los medios españoles que se han hecho eco del caso, dando cuenta de la situación que impide a los hijos de Brañanova pasar sus vacaciones en España y despertando el interés político por el proceso.
Así, periódicos de difusión nacional como El Mundo, han puesto su atención en la historia del ingeniero de Minas español, responsable del servicio de ascensores del aeropuerto de Dubai. Citando a la abogada y vicesecretaria general de la Asociación Pro Derechos Humanos de España (APDHE), Pilar Bueno, que se ha implicado en la defensa del caso, El Mundo relata el proceso administrativo seguido por Brañanova para llevar a sus hijos a España, que ha llegado incluso al Ministerio de Asuntos Exteriores.
También la Radio Televisión Pública Española (RTVE), en su programa La Mañana del pasado 27 de agosto, se ha hecho eco de la situación de Brañanova. RTVE ha hablado con Isabel Winkels, abogada del español desde que se inició el trámite de divorcio, que ha explicado las medidas que están tomando para conseguir que se autorice el viaje de los niños a España.
Winkels ha defendido el derecho de los niños, que son españoles, “a conocer su identidad”. La abogada ha explicado que es la madre de los niños la que se opone a que se permita la salida de los menores, argumentando que “para ella sería una humillación que se permitiera al padre llevarse a los niños a España porque entiende que el padre carece de capacidad para cuidarlos”.
En este sentido, Winkels indicó en RTVE que Brañanova no pide a la Embajada y a los organismos españoles que interfieran en el proceso judicial de divorcio en marcha en Emiratos sino que “apoyen el derecho de los menores a conocer su identidad y a conocer sus orígenes y a su familia paterna”.
En este sentido, en los últimos días se han producido nuevos avances en torno al caso. Así, según publica el diario La Nueva España, el pasado 30 de agosto, la delegación diplomática en Emiratos Árabes Unidos se puso en contacto con el ingeniero español para interesarse por la situación.
INICIATIVAS POLÍTICAS DE TODOS LOS PARTIDOS
Por su parte, el grupo parlamentario de Ciudadanos registró ese mismo día en la Junta General del Principado varias preguntas al Gobierno regional en relación con este caso para saber si el Principado ha mantenido algún contacto con el Ministerio de Asuntos Exteriores para interesarse por el asunto o si piensa realizar alguna acción "bien con el Ministerio de Asuntos Exteriores bien con la Embajada para ayudar a este asturiano", dijo la diputada Diana Sánchez.
Explica también La Nueva España, que los partidos políticos Podemos y Foro consideran que se está dando una vulneración de los derechos de los pequeños mientras que el PP asturiano entiende que ante un problema de esa naturaleza debe intervenir el Gobierno central por ser un asunto competencia del Ministerio de Asuntos Exteriores, una posición similar a la expresada por IU.
El PSOE de Lena, localidad natal del asturiano Brañanova, se ha movilizado asimismo para tratar de desbloquear el caso. La familia de Borja Brañanova ha agradecido la iniciativa política necesaria para la agilización de la resolución del caso, para la que también está en marcha una recogida de firmas a través de la plataforma change.org, que ya ha recabado cerca de 300 rúbricas.
