Un jardinero asiático de 32 años ha sido condenado por el Tribunal Penal de Dubai a cadena perpetua por estrangular a su empleador de 75 años hasta la muerte. El acusado confesó a las autoridades que había asesinado a su patrocinador porque hablaba y reñía mucho. Agregó que se sentó junto al cuerpo durante una hora después de cometer el asesinato.
Según investigaciones de la Policía y del Ministerio Público, la esposa de la víctima explicó que había salido de casa con sus hijos. Cuando regresó por la noche, el acusado la recibió en la entrada y le dijo que la víctima se había caído al suelo. Pero vio un trozo de tela envuelto alrededor del cuello de la víctima. Ella pensó que se había caído debido al alto nivel de azúcar ya que sufría de diabetes y había entrado en coma.
Cuando llegó la ambulancia, el equipo médico le dijo que la víctima había fallecido por lo que había que avisar a la policía, fue entonces que el acusado desapareció del lugar. Además de ser diabético, el anciano había sido operado de uno de sus ojos, no podía oír bien ni caminar solo. Sin embargo, era fuerte mentalmente.
Las investigaciones iniciales sugirieron que la presencia de un trozo de tela alrededor de su cuello y la sospechosa desaparición del imputado cuando llegó la policía indicaron que se trataba de un acto delictivo. La esposa manifestó que el acusado debía haber escapado porque estaba siendo patrocinado por otros y trabajaba ilegalmente.
El equipo del CID logró localizar al imputado y lo arrestó.
Durante el interrogatorio, admitió que trabajaba como jardinero y el hijo de la víctima lo convenció de que ayudara a su anciano padre por 2.000 dirhams al mes. Dijo que trabajó durante dos meses, pero que solo le pagaron 800 dirhams. Más tarde, su salario se redujo a 600 dirhams el mes.
También dijo que la víctima lo maltrataba, incluso lo golpeaba con su bastón. El día del incidente, la víctima le pidió que preparara té y shisha. Sin embargo, nada más aparecer lo golpeó con el pretexto de llegar tarde, por lo que el imputado lo empujó al suelo y le pidió que dejara de golpearlo.
Según el acusado, la víctima se levantó y lo abofeteó. Luego, el acusado lo empujó de nuevo y se agachó encima de él; la víctima se resistió y la estranguló hasta que murió. Luego se sentó junto a su cuerpo durante una hora.
