El Tribunal Penal de Dubai condenó a tres mujeres árabes a seis meses de cárcel, seguidas de la deportación, las multó con 5.000 dirhams y ordenó la confiscación de todo su dinero, por inducir a un menor a pedir limosna en lugares públicos del emirato.
El tribunal también ordenó que el hijo de la primera sospechosa fuera enviado a un centro de acogida, luego de que ella lo explotara para mendigar y solicitar ayuda financiera a los transeúntes en las calles.
Las condenadas y el menor pidieron limosna cerca de un centro comercial en el área de Naif de Dubai.
Un empleado árabe informó a la policía de que un niño mendigaba en las calles.
Durante el interrogatorio, el empleado dijo que más de una vez, mientras se dirigía al trabajo, vio a un niño de unos ocho años pidiendo limosna.
La policía localizó al niño y arrestó a la mujer árabe que resultó ser la madre del menor.
