Un joven, que compró un loro por 3.000 dirhams a un residente de Al Ain, pero no le abonó el dinero a pesar de llevarse el pájaro, deberá saldar su deuda.
El Tribunal de Primera Instancia de Al Ain ordenó al árabe que pagara el dinero al demandante después de que fuera declarado culpable de quitarle su loro y no cumplir con el acuerdo de compra.
El joven presentó una demanda, en la que exigió que el tribunal obligara al acusado a pagarle 3.000 dirhams, el valor del loro que le vendió como parte de un plan de pago diferido. Declaró que el acusado le compró el loro y se comprometió a pagarle más tarde, pero no cumplió su promesa.
El denunciante también presentó pruebas para respaldar su afirmación, incluida una copia de su conversación sobre el trato en WhatsApp.
El imputado se negó a asistir a las sesiones virtuales del tribunal para presentar su defensa, lo que motivó al juez a dictar sentencia en su ausencia.
El juez dijo en su fallo que la decisión se basó en las pruebas presentadas por el denunciante.
Además, el tribunal ordenó al acusado que pagara los gastos legales del demandante.
