Un expatriado de 27 años que apuñaló a su esposa hasta la muerte, perdió su apelación contra una pena de prisión de diez años por asesinato.
El Tribunal de Apelaciones de Dubai confirmó una sentencia de diez años de prisión, ordenada por un tribunal inferior contra el acusado, un guardia de Camerún. También confirmó un castigo adicional de tres meses de cárcel por intento de suicidio, así como la deportación tras cumplir la condena.
En octubre del año pasado, el Tribunal de Primera Instancia de Dubai encontró al guardia culpable de asesinar a su esposa y luego tratar de acabar con su vida apuñalándose varias veces con un cuchillo.
La comisaría de policía de Al Barsha fue alertada sobre la tragedia doméstica el 7 de septiembre de 2017.
Un joven camerunés que presenció el incidente declaró que "estaba en mi apartamento viendo la televisión cuando llegó mi compañero de cuarto (el acusado) y su esposa. Los dejé solos en la habitación. El acusado estaba acostado en el cama mientras su esposa estaba ocupada con su teléfono móvil".
Unos 45 minutos después, el testigo regresó a la habitación y vio a varios hombres en la puerta. "Eran trabajadores de mantenimiento. Llamaron a la puerta y no obtuvieron respuesta. Grité el nombre de mi compañero de cuarto, pero fue en vano. Luego llamé a su número de teléfono y tampoco contestó. Un ingeniero de reparación abrió la puerta con una llave de repuesto. Cuando la puerta se abrió parcialmente, vimos al acusado en el suelo claramente herido. La esposa también estaba allí en un charco de sangre", relató el testigo ocular.
"Eran una pareja feliz y nunca los había visto pelear", agregó.
"Cuando llegamos a la escena del crimen, encontramos al personal de seguridad del edificio y a los paramédicos que ya estaban allí. Salpicaduras de sangre estaban por toda la habitación y en las paredes. Las sábanas estaban en el piso. El esposo estaba apoyado en la cama herido, con una puñalada en el abdomen y un cuchillo junto a él. Se encontró una cuchilla en la habitación", relató un cabo de la policía.
Un experto forense señaló que el acusado se sometió a una cirugía por las heridas internas que se infligió a sí mismo. Tenía seis heridas de arma blanca, algunas de ellas le habían atravesado el intestino. "Esas heridas podrían haber sido fatales si no hubiera sido llevado de urgencia al hospital".
Además, el experto descartó que el acusado hubiera podido ser apuñalado por otra persona porque sus manos y brazos estaban libres de cortes. El esposo admitió ante los investigadores que apuñaló a su esposa varias veces, incluso en la espalda, cuando ella intentó huir de él.
El fallo es veredicto final ya que el acusado no lo impugnó en el Tribunal de Casación.
