Dos niñas de Sri Lanka se ahogaron este sábado por la noche después de intentar tomar un selfie junto al conocido manantial de agua Ain Jarziz en Salalah.
Las chicas, que estaban en un picnic familiar, posaban para la imagen cuando una de ellas resbaló.
"Ella agarró la mano de la otra chica que cayó con ella al agua", explicó un funcionario de la Policía Real de Omán (ROP) al diario Gulf News.
Zainab Tuaurashed, una estudiante en una escuela privada local, era la chica que perdió el equilibrio y en su desesperación se aferró a Ruwan Delsara Herath Samarweera, de 13 años, que asistía a la Escuela de India de Salalah.
Los padres de las niñas llamaron a los equipos de rescate. Pero el manantial Ain Jarziz tiene aproximadamente 15 kilómetros y como las niñas no sabían nadar, cuando llegó el equipo de rescate ya se habían ahogado.
Sus cuerpos se trasladaron al hospital Sultan Qaboos en Salalah.
La tragedia ha sido la primera relacionada con un selfie en el país, según la ROP.
Ain Jarziz es un sitio turístico muy popular en el país vecino de Omán para reuniones campestres.
Los expertos en seguridad han denominado a las zonas escarpadas no aptas para selfies.
Los casos de muerte por ahogamiento son comunes en Omán, las personas siguen haciendo caso omiso a las advertencias de las autoridades sobre nadar en el mar revuelto y las zonas propensas a inundaciones. Los niños constituyen la mayoría de las víctimas por ahogamiento ya que a menudo son arrastrados por las corrientes fuertes.
La Autoridad Pública para la Defensa Civil y ambulancias (PACDA) organizan regularmente campañas para advertir a los padres en contra de permitir a sus hijos meterse en el agua sin supervisión y se resaltan que los sucesos se deben a un comportamiento negligente.
Más de 10 niños se han ahogado en Omán en el último año, según las cifras de PACDA.
En total, se registraron 113 casos de ahogamiento en 2015, en comparación con 150 casos en el 2014.
