Una empleada doméstica de origen asiático está siendo juzgada en el Tribunal de Delitos Menores del emirato de Ras Al Khaimah (RAK) por los cargos de vender tres coches de lujo alquilados marca Bentley, Lamborghini y McLaren a su empleador por 1.650.000 dirhams. El empleador también es de origen asiático.
El asiático denunció que le había comprado los deportivos a su empleada para más tarde darse cuenta de que pertenecían a una empresa de alquiler de coches.
El tribunal juzgó el caso el lunes y la próxima audiencia se celebraría el 12 de septiembre.
Los abogados de la acusada, Salem Ahmed Al Kit y Mahmoud Hanafi, solicitaron al tribunal que dejara en libertad a su clienta, ya que los documentos que se le atribuyen fueron falsificados. También citaron discrepancias en las acusaciones formuladas por el denunciante, como que la acusada le vendió coches caros que luego resultaron pertenecer a una empresa de alquiler mientras trabajaba como ayudante doméstica. Argumentaron que los ingresos de la trabajadora ni siquiera le permitían comprar un neumático para "ninguno de esos tres vehículos".
También trató de conocer el origen del dinero que el patrocinador pagó como acuerdo de la venta a la empleada.
