¿Estoy muerta? ¿Quiénes son esos ángeles que me miran? '. Estos eran los pensamientos que corrían por la mente de una alpinista delirante con sede en Dubai cuando enfermó a 5.000 metros de altura en una montaña en Nepal.
La activista y entrenadora libanesa Tima Deryan se puso enferma cuando intentaba escalar el pico Mera en Nepal durante el pasado fin de semana, pero nunca imaginó que podría ser Covid-19.
En declaraciones al diario Khaleej Times Tima señaló que está feliz de haber salido con vida. “No me di cuenta de que tenía coronavirus. Creía que tenía gripe estomacal, que es común al escalar grandes alturas. En un momento, mis niveles de saturación de oxígeno estaban al 50 por ciento. Es un milagro porque me había puesto muy enferma”.
Solo después de que fue rescatada y examinada nuevamente para Covid-19 en Katmandú, supo que era positiva. “En un momento, cuando estábamos en un albergue en la cima, el sherpa, mi socio y el dueño del albergue estaban sobre mi cabeza, mirándome. Pensé ¿Estoy muerta?"
Tima tenía síntomas, pero no se lo tomó en serio; sufrió fiebre, escalofríos, tos intensa, náuseas y diarrea.
Residente de Dubai desde hace 22 años, Tima comenzó a escalar montañas en 2015. Es la primera libanesa y la árabe más joven en escalar el Everest.
A 6.476 metros, Mera está clasificado como un pico de trekking. Los escaladores que contraen Covid no son desconocidos en Nepal y el escalador noruego Erlend Ness fue el último en ser evacuado el 24 de abril de este año. Nepal ha emitido 377 permisos este año para escalar la montaña, y se espera que el número final supere los 381 entregados en 2019.
“Se estaban produciendo muchas otras evacuaciones médicas. Yo no era la única”, contó Tima. “Hicimos una prueba de PCR antes de la salida en Dubai y una segunda después de nuestra llegada a Katmandú. Antes de emprender la expedición, había salido a comprar algunas cosas que necesitaba para la caminata" y sospechó que pudo haber contraído el virus en Nepal.
Al tercer día de escalada, el equipo se detuvo en una casa de té a 3.000 metros de altitud. “Estaba vacía y fuimos cautelosos. Teníamos nuestro desinfectante, todo estaba limpio, pero fue entonces cuando comencé a sentirme febril. Le pregunté a mi compañero si debía ser Covid… pero nos reímos de eso", explicó. Si bien, en retrospectiva, pudo haber sido aconsejable que la pareja detuviera su viaje, Tima siguió adelante.
“Al día siguiente, comencé a sentirme un poco débil y tenía tos persistente. Todos están muy por delante de mí. Pensé que era por el clima y caminaba lento. En lugar de lo habitual que hubiera sido tres horas, me tomó cinco. Estaba mareada, con náuseas y sentí que mi cuerpo se apagaba". A medida que pasaban los días, la condición de Tima empeoraba.
“Estaba temblando y había comenzado a nevar. Mi corazón estaba latiendo. No pude salir del saco de dormir. No pude dar dos pasos; Me mareaba y colapsaba ”, agregó. Con el paso de los días, no podía comer ni beber agua debido a las náuseas. Finalmente, a los 5.000 metros durante el quinto día de escalada, cuando se encontraba en un albergue, decidieron llamar a un helicóptero de rescate. Una vez que la pareja regresó a Katmandú, se descubrió que tanto Tima como su compañero eran positivos a Covid.
Ahora están en cuarentena en un hotel de la ciudad y esperan dar negativo para poder regresar a Dubai.
