Redacción
30 de agosto de 2016, 18:44
Un solitario gol de Xavi Planas fue suficiente para que el Infantil B del FC Barcelona se proclamase campeón de la World Challenge Cup de Tokio.
Sin embargo, la imagen del partido fue la de los jugadores azulgranas consolando el llanto incontenible de sus rivales del Omya japonés.
El diario The National recoge el momento en que uno por uno fueron dando ánimos, abrazos y palmaditas a los inconsolables jugadores nipones para que levantasen la cabeza y disfrutasen del buen papel que habían tenido en un torneo donde fueron finalistas.