Hay perfiles de españoles residentes en Emiratos Árabes Unidos (EAU) que es obligado destacar. Y el del malagueño Antonio Gámez, sin duda, es uno de ellos. Lleva 30 años en la región del Golfo, gran parte de los cuales los ha pasado en Dubai. Aquí abandera destacadas iniciativas para ayudar a los españoles que acaban de aterrizar o a otros que buscan empleo o quieren cambiar de trabajo. Es lo que hace este ingeniero técnico industrial en su podcats quincenal, donde a través de interesantes entrevistas arroja luz sobre la auténtica realidad de esta tierra. El éxito de la propuesta lo demuestra que en marzo ha superado el centenar de emisiones. Y sigue adelante. Eso sí, considera necesario que se sea consciente de que para mantener la iniciativa en pleno auge son necesarios respaldos, también el financiero. Porque si algo tiene claro Antonio Gámez es que por estas tierras "nadie regala nada".
¿De dónde le viene el interés por promover iniciativas que ayudan a los residentes españoles en Emiratos Árabes Unidos?
De un tiempo bastante lejano que va más allá de mi llegada a Emiratos Árabes, de cuando residía en Qatar. Allí organizaba reuniones mensuales en casa o en hoteles porque la gente necesitaba comunicarse y conectar unos con otros. Hay que entender que había bastantes menos españoles que hoy aquí.
¿Cuántos años lleva en Emiratos Árabes?
Si no recuerdo mal son 23 años. Y anteriormente estuve residiendo en Doha cinco años más.
O sea que va por...
Casi 30 años.
Y cómo acabó en esta parte del mundo.
Mi salida fue muy sencilla. Hay que remontarse tres décadas atrás, cuando en España había una tasa de paro elevada y todo el mundo se tiraba de los pelos. Rozábamos el millón de desempleados. Mi empresa cerró y una de las pocas vías que tenía de seguir manteniendo un trabajo era venir hasta aquí. Todo el mundo me pregunta que cuándo voy a volver. Pero no parece que sea el momento teniendo en cuenta que España en la actualidad roza los tres millones de parados.
¿Desde cuándo despliega en Emiratos Árabes su vertiente más solidaria?
Desde el año 2002. Entonces fueron los inicios. Luego empecé a organizar reuniones de españoles más serias. Eso fue por 2012. Y más tarde creé un blog, puse en marcha un podcast y también una serie de encuentros temáticos.
Recuerdo que aquellas reuniones que usted inició hace diez años tenían gran éxito, acudían numerosos españoles, muchos de ellos recién aterrizados en Dubai.
La necesidad de información siempre existe; siempre hay que hacer un trámite, o tienes una consulta o un problema familiar. Son necesarias las referencias, comunicarse con alguien para encontrar una pequeña solución y evitar repetir los mismos errores que otros cometieron a la hora de sacarse la tarjeta del párking, de saber cuál es la mejor tienda para comprar, de cómo registrarse en un determinado servicio o de cómo empezar una empresa. Todos hemos pasado por ahí y hemos sufrido.
Usted es un testigo privilegiado de cómo ha evolucionado el perfil de los españoles en Emiratos Árabes. ¿Ha cambiado en estos últimos diez años?
Siempre han existido dos perfiles. Uno es el emigrante por necesidad y otro es el emigrante por elección. El emigrante por necesidad sale de España porque necesita un puesto de trabajo, necesita una comodidad para su familia, necesita unos ingresos, necesita pagar un piso o una propiedad. Y luego existe el otro perfil, el del emigrante por elección, que es el perfil del profesional a quien se ha buscado y se le ha traído hasta aquí. Esos dos perfiles diferenciados siguen existiendo. Ahora hay que añadir un nuevo perfil que es el de la persona que viene a empezar su empresa o a invertir.
¿En Emiratos Árabes hay hoy oportunidades del mismo nivel que hace unos años?
Las oportunidades son diferentes. Hoy hay sectores que antes no existían. Pongamos los ejemplos del sector ferroviario, del transporte público, de las transformaciones digitales. Hay sectores nuevos donde los españoles pueden recalar y encontrar oportunidades. Y siguen los sectores clásicos, las empresas de servicios, el sistema educativo, que continúa creciendo muchísimo. Hay oportunidades en todos los campos. Pero ¡cuidado! Hay que batirse el cuero con cualquier otra nacionalidad del mundo. Y esto no ocurre en España.
¿Qué españoles necesitan más ayuda cuando llegan a Emiratos Árabes?
Todos padecemos cuando llegamos a un país nuevo. Entre otras razones porque vivimos del tópico, del documental que pasaron por televisión o del artículo publicado. Suelen ser sensacionalistas, van a la desgracia o la extrema fortuna. Nada es cierto. Hay mucha desinformación, sobre todo en el tema cultural y en el tema económico. A pesar de venir con abogados y asesores, existe un gran desconocimiento sobre cómo funciona el país. Y además hay que aprender que aquí todo cambia continuamente.
"Uno de los grandes atractivos de Emiratos Árabes es que supuestamente nadie paga impuestos, pero eso no es así"
Es decir que, por ejemplo, la imagen de lujo que los medios proyectan de Dubai en España u otros lugares del mundo no corresponde con la realidad.
Soy de Málaga y he ido a Marbella mil veces a ver a mi abuela. Allí vivía en un piso bastante modesto con mi tía, que trabajaba de cocinera. Marbella es un sitio de lujo, una pequeña ciudad de Europa donde se ven muchos Rolls-Royce y existen campos de golf en todos los rinconres. Sin embargo, hay mucha gente que no vive así. Y aquí pasa exactamente lo mismo. Es más fácil vender un sitio de lujo. Pero ese sitio de lujo se mantiene gracias al sudor y el esfuerzo de miles de personas que trabajan detrás. Aquí no regalan nada. En Marbella tampoco. Uno de los grandes atractivos de Emiratos Árabes es que supuestamente nadie paga impuestos, pero eso no es así.
Existe el IVA, va a entrar el impuesto de sociedades y lo que queda es el de la renta, ¿no?
Efectivamente. Pero no es solo eso. Usted paga por la tramitación de su visa, usted paga una serie de impuestos por cada artículo que compra. Usted paga impuestos por los servicios que le prestan. Y se paga por aparcar en cualquier parte que vaya.
¿Qué iniciativas desarrolla actualmente?
Son tres. Por una parte está el blog de Empleándote en Dubai, que básicamente se dedica a informar a personas recién llegadas o que quieren cambiar de empleo o buscan trabajo. Incluye un podcast que se emite cada 15 días y que en el mes de marzo ha superado el centenar de emisiones. También desarrollo un grupo de WhatsApp para emprendedores y personas que han empezado o quieren crear su empresa y necesitan conexiones y contactos. Y hay una tercera, tan seria como las otras dos, que persigue ayudar a cocinar en casa a través de recetas. Esta última surgió durante la pandemia, cuando la gente empezó a preguntarme en qué supermercado podía comprar tal o cuál cosa. Y me empezaron a enviar recetas. Las reunimos en un grupo de WhatsApp y ahora se ha convertido en el blog Recetas del Expatriado, que ya va por su tercer año.
Alguien con la intención de venir a Dubai a buscar empleo, ¿qué debe tener en cuenta?
Voy a contar una anécdota personal. Antes de llegar a Emiratos Árabes me dijeron: "Antonio, tú no te preocupes, porque esto es un país como cualquier otro". Bueno, no es cierto. Esto no es un país como cualquier otro. Hay que documentarse muy bien antes de venir. He sacado en claro que lo que vas a encontrar depende de cada sector y de lo que tú quieras hacer. Necesitas información, documentación fiable procedente de varias fuentes. Lo mejor es acudir a personas de tu sector, conectar con ellas a través de LinkedIn y hablar de lo que te preocupe.
¿Qué casos le han sorprendido?
Podría escribir un libro. Uno de ellos fue una persona que me contactó a través de LinkedIn y me dijo que iba venir a Dubai a buscar empleo en el sector de la educación. Se hizo un listado de colegios y cinco rutas que me las envío previamente. Lo revisé todo y le pude decir que algunos colegios estaban cerrados o explicarle que otros se hallaban en localizaciones muy lejanas. Llegado a Dubai, incluso le acompañé un par de veces. Me pareció una iniciativa muy buena. Hubo otra persona del sector de la construcción que siguió un proceso parecido y miraba en Google Maps a través de las fotos de satélite los lugares con movimientos de tierra para saber dónde iba a empezar una obra. Visitaba esos sitios. Me pareció curiosísimo. Y uno de los emprendimientos que a mí me ha sorprendido más es el de una señora que se dedica a hacer terapia con caballos para solventar problemas psicológicos de personas. Nunca lo había visto.
Y todos ellos son españoles.
Todos españoles.
¿Es recomendable venir a la aventura?
No se lo recomiendo a nadie.
¿Cómo ha evolucionado Emiratos Árabes en los cinco lustros que lleva por aquí?
Ha cambiado mucho. Cambia cada año. Cambia cada día. Evoluciona a una velocidad vertiginosa. Tanto a nivel de población como de actividad económica. Es el crecimiento continuo con una estabilidad envidiable.
¿Superada la pandemia?
Al igual que en cualquier otro país, muchas personas fueron despedidas y cerraron numerosos negocios. Empresas con mil empleados pasaron de la noche a la mañana a no tener ninguno. Hoy lo que sigue es una gran demanda de profesionales para cualquier sector. Quieren volver a contratar a profesionales para recuperar los niveles anteriores a la pandemia.
"Cumplo la profecía de mi abuela: siempre quiso que fuera sacerdote porque decía que me gustaba escuchar a las personas"
¿Qué opinión le merece el proceso de emiratización que lleva a cabo el Gobierno?
Admirable. Una gran iniciativa que ofrece la oportunidad de trabajar a los ciudadanos con nacionalidad emiratí. Lo único preocupante es la falta de formación. Es decir, ahora mismo las empresas buscan desesperadamente ingenieros. Pero no hay escuelas de ingeniería, por lo que cuesta encontrarlos. Creo que a este país le queda el salto académico, pero es cuestión de tiempo.
¿Su balance después de haber ayudado a tantísimas personas?
Hablar con tanta gente me resulta muy enriquecedor. Al fin y al cabo cumplo la profecía de mi abuela: siempre quiso que fuera sacerdote porque decía que me gustaba escuchar a las personas.
¿Son necesarios apoyos para sacar adelante iniciativas como las que abandera?
Entre otros, es necesario el apoyo financiero. No grandes cosas, pero cualquier aportación es buena y necesaria. Apoyo institucional no tengo. Ni lo necesito ni lo quiero.
