El Ministerio de Asuntos Presidenciales ha informado al pueblo de Emiratos Árabes Unidos, las naciones árabes e islámicas y el mundo entero, que el presidente de la nación, Su Alteza el jeque Khalifa bin Zayed Al Nahyan, ha fallecido a los 73 años este viernes 13 de mayo.
El Ministerio de Asuntos Presidenciales ha anunciado luto oficial y banderas a media asta por el difunto durante tres días en los ministerios, departamentos, instituciones federales y locales y en el sector privado durante 3 días, a partir de hoy.
El jeque Khalifa ocupó el cargo de presidente de Emiratos Árabes Unidos y gobernante de Abu Dhabi desde el 3 de noviembre de 2004.
Fue elegido para suceder a su padre, el difunto jeque Zayed bin Sultan Al Nahyan, primer presidente de EAU desde la Unión en 1971 hasta su fallecimiento el 2 de noviembre de 2004.
Nacido en 1948, el jeque Khalifa fue el segundo presidente de Emiratos y el decimosexto gobernante del emirato de Abu Dhabi. Era el hijo mayor del jeque Zayed.
Desde que se convirtió en presidente de Emiratos Árabes, el jeque Khalifa realizó una importante reestructuración tanto del Gobierno Federal como del Gobierno de Abu Dhabi.
Bajo su mandato, EAU ha sido testigo de un desarrollo acelerado que aseguró una vida digna para las personas que llaman hogar al país.
Después de ser elegido presidente, lanzó su primer plan estratégico para que el Gobierno emiratí logre un desarrollo equilibrado y sostenible, y puso en el centro la prosperidad de los ciudadanos y residentes de EAU.
Sus principales objetivos como presidente de Emiratos eran continuar por el camino trazado por su padre, el jeque Zayed, cuyo legado, dijo, "seguirá siendo el faro que nos guíe hacia el futuro, un futuro próspero donde reinará la seguridad y la estabilidad".
Asimismo, el jeque Khalifa dirigió el desarrollo del sector del petróleo y el gas y las industrias transformadoras que han contribuido con éxito a la diversificación económica del país.
En 2009 el jeque Khalifa autorizó a Abu Dhabi a intervenir para ayudar a Dubai cuando su vecino se vio afectado por la desaceleración financiera. En reconocimiento de esto, el edificio más alto del mundo, anteriormente conocido como Burj Dubai, pasó a llamarse Burj Khalifa a tiempo para su inauguración oficial en enero de 2010.
Más tarde, ese mismo año, en un discurso para conmemorar el 39 aniversario de la federación, el jeque Khalifa se mostró encantado de poder anunciar que la economía emiratí se había "recuperado por completo" de los efectos de la crisis económica mundial.
Los temores por la salud del gobernante surgieron en 2010 cuando WAM, la agencia estatal de noticias, anunció que había regresado a casa después de recibir tratamiento en Suiza por una afección médica no revelada. Regresó a tiempo para presidir una reunión del Consejo de Cooperación del Golfo.
El presidente reanudó su carga de trabajo, aunque fue menos visible a la vista del público mientras continuaba recuperándose, realizó una visita privada a Pakistán a fines de 2012 y se reunió con varios líderes mundiales, incluido el primer ministro chino.
Luego, el 25 de enero de 2014, llegó la impactante noticia de que el presidente había sufrido un derrame cerebral severo. La noticia la dio a conocer el Ministerio de Asuntos Presidenciales, que también anunció que se había sometido a una cirugía y que “su salud ahora era estable”.
