Con apenas 16 kilómetros cuadrados, con una cultura de talla mundial, una naturaleza virgen y un montón de actividades vacacionales, la isla de Saadiyat da para mucho. Situada en el Golfo Arábigo, justo al norte del centro de Abu Dhabi, Saadiyat combina naturaleza, cultura, gastronomía y tranquilidad, no es de extrañar que su nombre árabe se traduzca como "Isla de la Felicidad".
Mientras que Abu Dhabi alberga una arquitectura contemporánea, Saadiyat, a 20 minutos en coche del centro y del aeropuerto internacional, es un paraíso natural bordeado de pequeñas dunas de arena.
Los delfines mulares y jorobados del Indopacífico son visitantes habituales de las aguas cristalinas de la isla. A menudo, se les unen tortugas carey, en peligro de extinción, que anidan en las dunas de los 8,8 km de playa de Saadiyat, de marzo a junio. Cada nido puede albergar unos 100 huevos, aunque solo una de cada 1.000 tortugas carey llega a la edad adulta. Unos entablados elevados las protegen de los visitantes, como parte de un proyecto de conservación dirigido por Jumeirah.
La fauna no solo está en el agua. Los zorros árabes rojos y los pavorreales se encuentran entre los residentes más silvestres de la isla, mientras que los jugadores del Saadiyat Beach Golf Club a menudo tienen que planear sus golpes entre los movimientos de las gacelas árabes.
Cada año se contabilizan más de 300 especies de aves en Abu Dhabi. El Saadiyat Beach Golf Club incluso fue designado Santuario Cooperativo Certificado de Audubon, lo que significa que mejora las zonas naturales y los hábitats de la fauna, al tiempo que minimiza el impacto potencialmente dañino de un campo de golf. Gracias en parte a las prácticas de gestión medioambiental del club, pueden verse más de 150 especies de aves diferentes en el campo y sus alrededores.
De cara al futuro, el Museo de Historia Natural de Abu Dhabi abrirá sus puertas en 2025, en el Distrito Cultural de Saadiyat, la zona dedicada a las artes, el patrimonio y la cultura, con siete museos y centros de artes escénicas de categoría mundial. Será una vasta instalación de casi 40 metros cuadrados con instituciones de enseñanza e investigación anexas, exhibirá algunos de los especímenes más raros y preciosos encontrados en la Tierra, desde meteoritos hasta un esqueleto de T. rex.
Las piscinas al aire libre, ideales para Instagram, están rodeadas de cabañas y camas, mientras que los DJ hacen su trabajo junto a músicos de jazz y en vivo durante todo el día. Un gimnasio, spa y sauna ayudan a los clientes a mantenerse en forma.
El Saadiyat Beach Golf Club, abierto todo el año, alberga un campo de golf de 18 hoyos firmado por Gary Player. El propio Player, el legendario golfista sudafricano, ha organizado allí torneos benéficos por invitación. Si se juega desde los tees negros opcionales, el campo se convierte en el más largo de Emiratos Árabes Unidos, con 7,1 kilómetros, y resulta aún más sobrecogedor gracias a sus múltiples trampas de arena.
Con vistas a una larga playa de arena blanca y a las cristalinas aguas del Golfo, el barrio costero de Mamsha Al Saadiyat cuenta con un espectacular paseo marítimo. Comer fuera es, por supuesto, uno de los pasatiempos favoritos y hay multitud de opciones. Café y menús saludables, como salmón ahumado en salsa tataki e higos y burrata sobre pan pita con za'atar, están a la orden del día en locales como Ten 11 Beach y Cafe Artea.
Inaugurado en 2017, el Louvre de Abu Dabi es el mayor proyecto cultural de Francia en el extranjero. Sus notables exposiciones se encuentran en un espectáculo arquitectónico de Jean Nouvel, ganador del Premio Pritzker de Arquitectura.
Según publicó la CNN, el museo lleva a los visitantes por un viaje cronológico a través de la civilización mundial, desde la prehistoria hasta nuestros días. La colección permanente de 700 tesoros incluye ánforas griegas, joyas de oro romanas, porcelana china y cuadros de Bellini y Manet. Se complementa con otras 300 piezas cedidas anualmente por otros museos de todo el mundo, entre ellas 100 del Louvre de París.
El mes pasado se inauguró en la isla La Casa de la Familia Abrahámica como nuevo mensaje de tolerancia y convivencia. Con una mezquita, una iglesia y una sinagoga en el mismo recinto, el complejo interreligioso es un hito cultural que personifica los valores compartidos de coexistencia armoniosa y comprensión entre las tres religiones abrahámicas: el Islam, el cristianismo y el judaísmo.
