Un árabe ha sido condenado a muerte por el Tribunal Penal de Dubai por el asesinato de su novia europea en un incidente ocurrido en julio de 2020. Según la investigación, en un acto de venganza, el joven le quitó la vida a su exnovia luego de que ella quisiera terminar su relación debido a su romance con otra persona.
El condenado planeó previamente el asesinato y la siguió durante varios días, vigilando de cerca sus movimientos. El día del asesinato, entró en su casa, le cortó el cuello y le desgarró los intestinos.
Un residente del edificio informó al guardia de seguridad de un disturbio en el séptimo piso. Al llegar al lugar, el guardia encontró sangre cerca de la escalera. Intentó abrir la puerta pero no pudo. Luego subió desde otro piso y encontró a la víctima tirada en el suelo en un charco de sangre. El guardia informó inmediatamente a la Policía de Dubai del crimen.
La policía transportó el cuerpo y comenzó a recolectar pruebas en la escena del delito. Un oficial de policía dijo que un equipo de investigación reunió pruebas suficientes, identificó al acusado y lo detuvo cerca de un centro comercial.
Según el informe del diario en árabe AlKhaleej, el acusado admitió haber tenido una relación con la víctima en 2017. Pronto descubrió a través de las redes sociales que ella conoció a otras personas e intentó poner fin a su relación, pero él se negó y continuó persiguiéndola. La víctima pronto abandonó el país para huir de sus persuasiones y constantes amenazas. Pero después de dos años, descubrió que ella había vuelto a trabajar en Dubai.
La localizó y llegó a su oficina, donde ella accedió a reconciliarse y le solicitó un préstamo de 55.000 dirhams. Sin embargo, sólo pudo prestarle 30.000 dirhams, ya que recientemente había perdido su trabajo. Tras prestarle la cantidad, el acusado descubrió su relación con otra persona. Esto llevó a un altercado verbal que resultó en su decisión de terminar su relación una vez más. También le devolvió el importe prestado.
Impulsado por la ira, quiso vengarse y entró en su apartamento, la obligó a reanudar su relación y poner fin a los vínculos con otra persona. Después de hacer esta exigencia, se fue. Ella lo denunció a la policía por intimidación. A pesar de prometer a la policía que no volvería a acercarse a ella ni a intimidarla, regresó días después.
Posteriormente, el día del incidente la amenazó con un cuchillo y herramientas que compró para matarla. Cuando ella se resistió, él la arrastró y la agredió fatalmente en las escaleras del edificio.
