Un asiático de 34 años ha sido condenado a tres meses de prisión en Dubai y posteriormente será deportado por intentar agredir sexualmente a una mujer entrando en su habitación. El Tribunal de Apelación confirmó el veredicto.
Según los registros policiales, la asiática presentó una denuncia en la que afirmaba que el acusado había entrado en su habitación e intentó agredirla. La mujer informó de que sintió que alguien le tocaba los pies, lo que la hizo gritar y despertar a su compañera de cuarto. Cuando esta última vio al hombre parado cerca de los pies de la cama de la mujer le preguntó sobre su identidad.
El acusado le pidió que se callara y no gritara, por lo que la compañera llamó al seguridad y le informó del intruso en su vivienda. Ella fotografió al acusado cuando salía de la habitación y lo siguió mientras lo grababa en un vídeo hasta que se fue del apartamento. Luego huyó por el pasillo que conducía a los ascensores.
El guardia de seguridad, en su declaración, dijo que revisó las cámaras de vigilancia e identificó al imputado. Fue testigo de que el acusado era un trabajador que vivía en el edificio opuesto. Precisó el número de apartamento y llamó a la policía, que convocó al sospechoso.
Según consta en el expediente, el imputado negó haber cometido el delito y alegó que no recordaba sus actos porque se encontraba bajo los efectos del alcohol.
