Mujeres embarazadas, familias con niños pequeños, personas mayores, parejas jóvenes y más, conforman el saldo de afectados por el incendio que ocurrió la madrugada de este sábado en la Antorcha (The Torch) en Dubai Marina, rascacielos de 86 pisos y 351 metros de altura y 658 apartamentos.
Cientos de residentes de la torre esperan a conocer el estado de sus apartamentos, sin saber si lo han perdido todo o si sus pertenencias aún se encuentran intactas. Tristeza, enojo e incertidumbre es el ambiente que rodea las adyacencias del incidente.
Las autoridades de Defensa Civil y la Policía de Dubai se encuentran en el lugar de los hechos para facilitar el protocolo de seguridad y prestar sus servicios. Igualmente, se han facilitado las instalaciones del piso 97 de la Princess Tower, ubicada frente al sitio del suceso, para los damnificados. El mismo se ha abastecido con colchones y sábanas.
Sin embargo, muchos de los presentes de variadas nacionalidades y la mayoría expatriados, no poseen ni su billetera para adquirir algún producto de primera necesidad o ropa. Una de las parejas afectadas, que espera a su primer hijo y prefiere mantener el anonimato, comentó a EL CORREO DEL GOLFO que estaban bien pero no tenían "ni un dirham en el bolsillo y todas nuestras pertenencias están allá adentro".
Las personas no saben cuándo se les permitirá el acceso a sus moradas y temen que algún bien haya sido comprometido por el fuego. Otro de los afectados es indio y con lágrimas en los ojos agradeció a Dios por haber salido con vida. "Llevo tres días en Dubai y hace dos me mudé al apartamento. Doy gracias a Dios porque atendí a la alarma de incendios y salí. Las autoridades han manejado todo muy bien", apuntó. Entre los damnificados se encuentra la argentina Merchi Nazar y su pequeño bebé, quien solicitó ayuda por las redes sociales. Escribió: "gente se incendió nuestro edificio, estamos en el Emirates Croen en casa de desconocidos que nos acogieron,necesitamos que alguien nos aloje en su casa esta noche. No tenemos ni celular ni billetera, sólo la ropa que tenemos puesta, no nos dejan entrar al edificio y no sabemos cuándo ni si algo se quemó porque nuestro piso fue uno de los más afectados". EL CORREO constató la presencia de Nazar con su bebé en la Emirates Croen cuando se disponía a entrar a un vehículo azul de una joven pareja que les prestó ayuda.
Los funcionarios en la zona insisten que nadie puede permanecer en las adyacencias inmediatas al edificio y, a pesar de que el tráfico ha vuelto a la normalidad, aún hay pedazos de escombros cayendo del rascacielos en todas las direcciones. Los fuertes vientos no han colaborado con el hecho puesto que en un principio ocasionó el esparcimiento del fuego. En la actualidad remueve los materiales quemados de la torre hacia los transeúntes y carros que además se detienen a observar la situación. Los afectados esperan ser reubicados y recibir información sobre sus bienes. EL CORREO DEL GOLFO invita a todos aquellos quienes deseen colaborar con ropa o algún artículo de primera necesidad a dirigirse al lugar y llevar su donativo.
