Desde los asientos traseros de su Cadillac Escalade, Chris Elley es capaz de utilizar el tiempo necesario que pasaría al volante para desarrollar su negocio de TI.
El empresario británico es trasladado por un chófer contratado, que está sentado en la parte delantera dividida por una pantalla que se convierte en un monitor iMac de gran tamaño conectado a un teclado inalámbrico en la parte posterior.
Si el señor Elley quiere hablar con el conductor, él toma un teléfono que une la parte posterior del coche con la persona al volante.
"Es un poco ostentoso, pero a veces necesitas un poco de intimidad", admite Elley, un joven de 34 años de Essex, Reino Unido, que lleva una empresa de TI denominada WS Media, que administra sitios web como bored.com que tiene juegos en línea simples.
El británico tiene una oficina en Gold and Diamond Park, pero a menudo tiene que desplazarse a través de la ciudad para reuniones de trabajo y decidió invertir en el 4x4, 550.000 dirhams porque "estaba harto de perder el tiempo por culpa del tráfico".
"Estaba navegando en línea y lo vi, pensé que sería una alegría no conducir, no perder tanto tiempo cuando me desplazo, es mucho más fácil simplemente sentarse aquí y relajarte sin estrés con las carreteras ", agregó el ejecutivo.
El coche lo tiene lleno de accesorios extravagantes. Una nevera para las bebidas, luces de lectura, los asientos son también sillones de masaje y hay iluminación ambiental para cuando se reúne con clientes.
"Una de las ventajas de tener un coche tan único es que siempre es motivo de curiosidad y nunca dejas de impresionar, además los costes del coche no son altos",aseguró Elley.
"Todo el mundo sabe cuánto cuesta un conductor en Dubai, consume algo más de gasolina que un coche normal pero aquí el combustible es barato", explicó el empresario.
Sin embargo, hay algunos inconvenientes: a los cinco meses de comprarlo nuevo, la pantalla del iMac dejó de trabajar, junto con la radio y Elley ha pasado el último mes tratando de encontrar a alguien que tenga los conocimientos técnicos para poder arreglarlo.
"Debido a que es tan único, hay muy pocas personas que saben cómo funciona y poderlo arreglar, mientras tanto uso el portátil en su lugar", comentó Elley que no ha hecho cuentas del tiempo que ahorra ni el aumento de la productividad conseguida, en parte porque él no tiene un jefe a quien justificar la compra y era una preocupación secundaria.
