Un policía en Dubai detuvo a un hombre por realizar un juego de azar con apuestas en la vía pública.
El oficial encontró a algunas personas reunidas alrededor de un hombre en una calle, así que se acercó preguntó cómo participar en el juego. El organizador le dijo que podía apostar con 10 dirhams y que obtendría lo mismo si ganaba o perdía. Fingió apostar para entender el juego y luego detuvo al implicado y lo remitió al Ministerio Público.
En su declaración ante el Ministerio Público, el policía sostuvo que el imputado fue detenido y se le decomisaron las herramientas que se encontraron en su poder, entre ellas una lámpara eléctrica que utilizaba para iluminar una zona de la calle que convirtió en un circuito de juego.
Confirmó que el acusado administraba y organizaba el juego de apuestas por su cuenta, y se encontraron 20 dirhams en su posesión como ganancias del juego. El imputado afirmó que se instaló cerca de un hotel para organizar una partida de apuestas.
El Tribunal Penal lo condenó a tres meses de prisión y lo multó con 100.000 dirhams. También ordenó su deportación tras cumplir su condena.
