El Tribunal de Primera Instancia de Al Ain en el emirato de Abu Dhabi condenó a una persona a devolver 38.131 dirhams a otra y le impuso una multa de 4.000 dirhams, después de que llamara a la víctima y le dijera que era policía, luego pidiera su información bancaria y contraseña, con el fin de sustraer la misma cantidad de dos tarjetas bancarias que pertenecían al demandante.
Tras la investigación, la policía identificó al sospechoso, quien fue remitido a la Fiscalía y luego al tribunal, donde fue condenado según sentencia penal.
La víctima presentó una demanda en la que solicitaba que el sospechoso se viera obligado a pagarle 55.000 dirhams en compensación por los daños sufridos, además de obligarlo a pagar los honorarios y gastos del proceso.
Aportó copia de la sentencia penal, certificado expedido por el Ministerio Público en el que consta que el sospechoso no recurrió y copia de la investigación policial.
El tribunal indicó que los documentos prueban que el sospechoso fue condenado por el cargo de apoderarse de la cantidad antes mencionada y que esto causó daño al demandante.
Por lo tanto, el tribunal obligó al sospechoso a devolver el importe e indemnizar a la víctima con 4.000 dirhams.
