Francia ha sufrido en la noche del viernes un atentado terrorista múltiple con seis ataques coordinados en distintos puntos de París. El más grave ha sido el ocurrido en la sala Bataclan, donde los asaltantes han asesinado con total frialdad decenas de personas que asistían a un concierto de música.
El Ayuntamiento parisino ha ofrecido un primer balance de cien muertos en su interior, a los que habría que añadir otras decenas en distintos puntos de la capital. Finalmente la cifra total asciende a 129. Los heridos contabilizados son 300. El fiscal ha señalado que han sido ocho los terroristas muertos. Uno de ellos ha sido identificado como francés y al lado de otro cadáver ha sido localizado un pasaporte sirio.
El presidente francés, François Hollande, ha anunciado el cierre de fronteras (medida sustituida luego por el restablecimiento de controles fronterizos en carreteras y aeropuertos), el inicio del estado de emergencia y la movilización del Ejército tras los atentados.
Nada más conocerse los atentados vehículos militares han aparecido en las calles de París para colaborar con la Policía en un despliegue de 1.500 efectivos. Cuando no se sabía con exactitud cuántos lugares habían sido atacados, el Ayuntamiento ha pedido a los habitantes que no salieran a las calles, un ejemplo de que las autoridades no sabían si se podían producir nuevos ataques.
En su declaración televisada, Hollande ni siquiera descartó que pudiera haber más ataques en las próximas horas, e insistió en que no pararán hasta castigar a los responsables. El Gobierno francés también se reunió de forma extraordinaria. Hollande ha cancelado su viaje a Turquía para asistir a la cumbre del G20 y ha presidido este sábado una reunión del Consejo de Seguridad.
La policía asaltó la sala Bataclan cuando varios testimonios, incluidos los de las personas que habían podido escapar en los primeros momentos, confirmaban que los terroristas no pretendían coger rehenes, sino que simplemente estaban disparando de forma indiscriminada contra los asistentes al concierto. En el asalto, los agentes abatieron a tres de los agresores, lo que permitió iniciar el rescate de los heridos y la evacuación de los cadáveres.
Uno de los rehenes que escapó de la sala contó a CNN que los terroristas estaban "ejecutando" en silencio a todas las personas que encontraban. France 24 informó de un texto publicado en Facebook por una persona que estaba dentro, gravemente herido, y que estaban matando a los rehenes "uno a uno".
Un periodista de Europa 1 estaba en la sala Bataclan cuando comenzó el ataque. Creyó ver a dos o tres hombres, ninguno de ellos con la cara tapada, disparando a la multitud con fusiles Kalashnikov. No dejaron de disparar en ningún momento durante más de diez minutos. Cuando agotaban la munición, recargaban sin mostrar ninguna urgencia y seguían disparando. El periodista resultó herido pero logró escapar.
Otra persona que estaba en Bataclan contó a France Info: "En mitad del concierto, gente armada ha entrado. Han estado pegando tiros con armas automáticas. Eran 3 ó 4 personas. He corrido y he salido de la sala".
Antes del ataque, dos restaurantes y las inmediaciones del estadio Stade de France fueron los lugares confirmados en los que comenzó una noche de terror. Al final de la noche, fuentes policiales dijeron que los puntos atacados fueron seis: el estadio Stade de France, la sala Bataclan, Rue Alibert, Rue Charonne, Rue Faidherbe y Rue Beaumarchais.
En los restaurantes, los asaltantes dispararon desde fuera ráfagas de tiros contra las personas que estaban en las terrazas. Era la noche del viernes y la mayoría de los locales estaban llenos de gente.
En zona del Stade de France, se pudieron escuchar con claridad varias explosiones. En su interior, jugaban un partido de fútbol las selecciones de Francia y Alemania, al que asistía François Hollande, que fue evacuado inmediatamente al oírse la primera explosión.
La agencia AFP confirmó después que una de las explosiones fuera del estadio fue provocada por un suicida con explosivos escondidos en la ropa. Cabe la posibilidad, no confirmada a estas horas, que el terrorista pretendiera estallar la carga dentro del estadio y que fuera detenido en la puerta.
Otro de los lugares atacados fue Le Petit Cambodge, un restaurante de cocina camboyana situado en una zona llena de locales de ocio llenos de gente, como es habitual, en un viernes por la noche. Algunos testigos confirmaron que dos personas armadas con fusiles Kalashnikov abrieron fuego de forma indiscriminada contra los clientes del local, situados en la terraza.
Hay un tercer local de ocio que ha sufrido un ataque con armas de fuego, un bar situado entre los dos lugares anteriores. Allí los muertos son una decena. Además, se ha registrado otro tiroteo en la zona comercial de Les Halles.
